Si estás pensando en adoptar...

 

A la hora de adoptar, lo más importante es estar totalmente seguro, no es una decisión que deba tomarse a la ligera. Habrá grandes compensaciones, pero también dificultades. Es una gran responsabilidad que nos acompañará durante toda la vida del animal, requiriendo nuestros cuidados: gastos de comida, accesorios, gastos de veterinario, posibles destrozos hasta que esté educado, mucho tiempo libre y paciencia, contar con él al marcharnos de vacaciones, etc.

 

Si ya lo has meditado, y estás totalmente decidido... ¡¡Enhorabuena!! Aquí te dejamos algunos consejos que pueden ser de utilidad.

 

Elige tu perro ideal

 

Muchas veces, nos dejamos llevar por el físico o la raza de un perro, pero debemos ir más allá. Como en las personas, cada perro es un mundo, y lo ideal es que elijas el perro que mejor se adapte a tu estilo de vida. Por eso nosotrxs hacemos unos cuestionarios pre-adopción exhaustivos, para asegurarnos que sois "la pareja ideal".

Aunque la gente prefiere adoptar cachorros, adoptar un perro adulto tiene también numerosas ventajas: conocemos su carácter, no necesita tanta actividad física, y estarás dándole una segunda oportunidad de conocer el amor. Que la edad nunca sea un impedimento para adoptar a un compañero
 

La educación de tu perro

 

Muchos de los perros que se adoptan vienen de situaciones de abandono y/o maltrato, por lo que pueden ser animales miedosos, con tendencia al hiperapego, ansiedad por separación... Ten paciencia durante el periodo de adaptación. Prepara la casa para su llegada. Nosotrxs podemos asesorarte sobre ciertas conductas, pero lo ideal es que, si tienes dudas, contactes con adiestrador profesional: un perro educado y equilibrado, es un perro feliz.

Recuerda enseñarle siempre en positivo y no al revés. El juego con tu peludo hará que reforcéis el vínculo. Es importante que salga mínimo 3 veces al día, que se relacione con otros perros y que haga ejercicio físico y mental.

 

La alimentación

 

La alimentación es también muy importante. Los cambios de alimentación deben hacerse progresivamente. Busca el pienso que mejor le siente a tu perro. Los mejores suelen ser aquellos con bajo contenido en cereales. También puedes probar con la dieta BARF, basada en alimentos naturales crudos. Si tienes cualquier duda, también podemos orientarte.